Morelia, Michoacán | Redacción ACG.- La creación artística como refugio, como extensión del cuerpo y como un gesto de protección frente al mundo es el hilo conductor de la obra que actualmente se presenta en el Centro Cultural Clavijero. En este espacio, la artista Carolina Pavia comparte una propuesta que entrelaza arte visual, diseño y sensibilidad poética, invitando al público a reconectar con la imaginación, la naturaleza y la inocencia.
Pavia se concibe a sí misma como una creadora de mundos, más allá de las técnicas y los formatos. Su obra surge de una exploración constante de materiales, medios y lenguajes que le permiten recrear aquello que habita en su interior, con la naturaleza como uno de sus referentes más cercanos y simbólicos. En ese proceso, la creación se convierte en un homenaje a la magia de la vida y a los espacios donde el alma encuentra cobijo.
Desde la infancia, el acto de crear ha sido una presencia constante en su vida. El dibujo, el papel y la imaginación funcionaron como refugio y punto de partida de una trayectoria que, con el tiempo, se expandió hacia otros territorios como la pintura, el graffiti y posteriormente el diseño de moda, donde descubrió una nueva forma de narrar a través de la relación entre la tela y el cuerpo.
Uno de los ejes conceptuales de la muestra es la obra Salida, de la cual se desprende una pieza de arte vestible: una sudadera inspirada en la leyenda griega de la rosa blanca, símbolo de la inocencia que, al enfrentarse al dolor del mundo, se transforma sin perder su esencia. La prenda propone una experiencia de abrigo y protección, como un regreso a la pureza anterior a la herida, invitando a quien la porta a reencontrarse con una mirada más sensible y honesta.
Para la artista, llevar el arte a un plano utilitario no implica despojarlo de su profundidad, sino permitir que la obra dialogue con la vida cotidiana. Cada pieza busca generar una conexión emocional directa, confiando en la honestidad creativa como un lenguaje universal capaz de cruzar fronteras y sensibilidades.
A lo largo de su trayectoria, Carolina Pavia ha colaborado con diversos diseñadores y proyectos artísticos, experiencias que han fortalecido su visión y reafirmado la importancia del trabajo colectivo. Sin embargo, esta propuesta marca un momento personal: la decisión de materializar una idea propia y sembrar una primera semilla que podría derivar en futuras líneas y exploraciones.
La exposición puede visitarse en el Centro Cultural Clavijero y permanecerá abierta al público hasta el 28 de febrero, ofreciendo un recorrido por un universo donde el arte, la fantasía y el cuerpo se encuentran para recordarnos que crear también es una forma de proteger lo que somos.