El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha dejado en claro que su país no aceptará ceder el control de la región del Donbás, una de las zonas más contestadas desde que comenzó la invasión rusa en 2022, a pesar de las intensas negociaciones diplomáticas que se mantienen para poner fin al conflicto.  

Durante una serie de declaraciones a medios y tras reuniones con el canciller alemán Friedrich Merz, Zelenski subrayó que la propuesta de Moscú de entregar toda la región de Donetsk y Lugansk, que constituyen el Donbás, no es aceptable para Ucrania: el mandatario calificó la postura ucraniana como “pragmática, realista y justa” y reiteró que no renunciarán a su territorio ni de facto ni de jure.

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Parte de las conversaciones de paz, lideradas en buena medida por los Estados Unidos y apoyadas por varios países europeos, han incluido la idea de crear una zona económica libre o una zona desmilitarizada en las zonas más afectadas por la guerra; sin embargo, Zelenski aclaró que estas fórmulas no implicarían control ruso y enfatizó que ningún acuerdo puede reconocer al Donbás como parte de la Federación Rusa.

Las negociaciones avanzan en medio de fuertes presiones diplomáticas desde Washington y Bruselas, donde algunos liderazgos han planteado compromisos difíciles para avanzar hacia un alto el fuego duradero, Zelenski se ha mostrado abierto a discutir distintos formatos de paz, siempre y cuando se garantice la seguridad y la integridad territorial de Ucrania.  

La firmeza de Kiev contrasta con la demanda rusa de consolidar su control sobre territorios que aún no ha logrado someter completamente por la fuerza, lo que continúa representando el principal punto de fricción en cualquier intento de acuerdo.  

Fuente: DW