La crisis en Medio Oriente alcanzó a México luego de que dos activistas nacionales quedaran retenidas tras un operativo militar en el mar Mediterráneo. Se trata de Arlin Medrano y Sol González, quienes formaban parte de una flotilla internacional que buscaba llevar alimentos y medicinas a la población de Gaza.

Las jóvenes viajaban en uno de los barcos que integran la Flotilla Global Sumud, conformada por delegaciones civiles de distintos países con la meta de romper el bloqueo marítimo impuesto sobre la Franja desde hace más de una década. Sin embargo, cuando se encontraban aún en aguas internacionales, las embarcaciones fueron rodeadas por la marina israelí y trasladadas sin consentimiento hacia territorio bajo su control.

A través de un video grabado antes de ser incomunicadas, las mexicanas pidieron la intervención urgente de las autoridades nacionales. Su mensaje fue directo: solicitaron a la presidenta Claudia Sheinbaum y al canciller Juan Ramón de la Fuente garantizar su regreso seguro al país.

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La situación ha generado una ola de preocupación en México. Familiares, colectivos y organizaciones civiles han exigido que la Secretaría de Relaciones Exteriores emita una postura clara y emprenda gestiones inmediatas para proteger no solo a Medrano y González, sino también a los otros cinco mexicanos que participan en la misión.

Mientras Israel argumenta que la flotilla violaba un “bloqueo legal”, los participantes internacionales aseguran que se trataba de una acción humanitaria legítima amparada en el derecho internacional. Organismos defensores de derechos humanos y personalidades políticas de diversos países se han sumado al llamado para garantizar la seguridad de los más de 500 tripulantes de la misión.

El incidente ocurre en un contexto crítico: Gaza atraviesa una de las peores crisis humanitarias de este siglo, con miles de víctimas civiles, hospitales colapsados y una población que vive bajo desplazamiento forzado. Para las activistas mexicanas, el objetivo de su travesía era justamente contribuir a mitigar ese escenario con la entrega de insumos básicos.

En México, se prevén nuevas movilizaciones en los próximos días para exigir acciones diplomáticas más contundentes. Por ahora, familiares y allegados esperan noticias oficiales sobre la situación legal y física de las connacionales, en medio de una coyuntura internacional cada vez más tensa.

Fuente: Excelsior