La CEDH investiga a Carlos Manzo por posibles declaraciones de discurso de odio hacia periodistas, afectando la libertad de expresión.
Morelia, Michoacán.- Los dichos de Carlos Manzo Rodríguez, alcalde de Uruapan, sobre periodistas y su labor, pueden ser valorados como discurso de odio, consigna la en una queja de oficio que inició contra el edil.
El organismo elaboró el expediente CEDH/8119/2025-Q a propósito del actuar de Carlos Manzo en torno a medios de comunicación y periodistas, con declaraciones que ha vertido en diferentes espacios, entre ellos sus ruedas de prensa denominadas “Nochecitas del Sombrero”.
La queja también se encuentra ya promovida ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), por la trascendencia del tema y por ser de interés nacional.
“Es un hecho notorio, público y conocido que Carlos Alberto Manzo Rodríguez, quien ejerce el cargo de presidente municipal de Uruapan, Michoacán, ha hecho declaraciones públicas en los eventos llamados ‘Nochecitas del Sombrero’, las cuales se han difundido en redes sociales y diversos medios de comunicación, mismas que pueden vulnerar los derechos de libertad de expresión y de prensa, haciendo expresiones que hacen referencia a personas periodistas y comunicadoras con adjetivos descalificativos, denigrantes, despectivos, de desprecio y estigmatizantes”.
En el escrito se alude a algunos de los señalamientos del edil señalando a periodistas como “chayoteros”, “están calentando la plaza”, “ellos están alertando a los delincuentes de que no pasen donde se encuentra la policía, se comunican en grupos de whatsapp”, “lo único que dejan ver estas páginas chayoteras es que también le sirven de aliados y trabajan para el crimen organizado”.
También se hace referencia a notas periodistas sobre la denuncia presentada por integrantes del Colectivo #NiUnoMás Michoacán por los delitos de amenaza y discriminación debido al discurso de odio que fomenta, así como a las justificaciones del edil en llamados que ha hecho para abatir delincuentes, negando abusos en Uruapan, entre otras.
La CEDH expone en la queja que “ése a la protección jurídica a la libertad de expresión y prensa, existen actos de autoridad que los vulneran”, tal como acontece con las manifestaciones hechas por parte de Calos Manzo, “cuyas declaraciones públicas con descalificativos que denostan a las personas periodistas pueden ser consideradas como expresiones o discurso de odio en contra de personas periodistas y medios de comunicación”.
Se recuerda que Carlos Manzo como autoridad está obligado a proteger los derechos de libertad de expresión y prensa, los cuales se transgreden con sus dichos.
Agrega además que los actos del munícipe pueden “generar actos de violencia o incidir en la comisión de delitos en contra de periodistas y comunicadores, considerando además que éstos pertenecen a un grupo vulnerable debido a los riesgos que enfrentan en el ejercicio de su profesión”.
