Alfonso Martínez defendió la extinción del APAS de Santa María, al señalar cobros sin servicio y falta de rendición de cuentas, y acusó intereses políticos detrás del conflicto por agua
Morelia, Michoacán.- El presidente municipal de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar, acusó la existencia de intereses políticos detrás del conflicto por el manejo del agua en Santa María de Guido, al defender la extinción de la Junta de Agua Potable (APAS) de esa tenencia, organismo que, afirmó, cobraba sin prestar el servicio ni rendir cuentas claras.
En entrevista, este lunes, el alcalde sostuvo que el problema de fondo es la operación de pequeños organismos que administran el agua sin supervisión municipal, lo que genera opacidad en el uso de recursos.
“En la ciudad no podemos tener todas esas extensiones de colonias con pequeños organismos que cobran y no entregan cuentas. El municipio debe de ser el que supervise esos organismos”, afirmó.
Martínez Alcázar explicó que la decisión de extinguir el APAS de Santa María se tomó tras detectar que se cobraban factibilidades sin que el servicio se brindara a la población.
“Cobraban las factibilidades pero no daban el servicio y ¿en dónde quedaba ese dinero?, entonces para qué se cobraban esas factibilidades, qué se hizo con ese dinero”, cuestionó.
Indicó que, ante la falta de cuentas claras, el Ayuntamiento determinó que el municipio asumiera directamente la prestación del servicio de agua.
“Al no haber cuentas claras es que se decide extinguir el organismo y él tiene que entrar a tomar el servicio, a dar el servicio”, señaló, al subrayar que ese es el origen del conflicto que derivó en manifestaciones.
Cuestionado sobre a quién atribuye los intereses detrás de la inconformidad, el edil respondió que “tienen la mano algunas expresiones partidistas”, aunque insistió en que para la mayoría de la población el tema central no es quién administra el agua, sino que el servicio sea continuo.
“La gente no le importa quién administra, lo que quiere es tener agua”, enfatizó.
Agregó que las quejas ciudadanas estaban dirigidas directamente contra la junta de agua, al reiterar que “los que cobraban era una junta que no daba el servicio, que nada más cobraba”, pese a que la responsabilidad última del suministro recae en el municipio.
Sobre el alcance del problema y el número de colonias involucradas en la zona sur de la ciudad, Martínez Alcázar evitó precisar cifras y señaló que los datos técnicos los tienen el director del OOAPAS, Adolfo Torres, y el secretario del ayuntamiento, Yankel Benítez, quienes concentran la información sobre colonias, población atendida y afectaciones derivadas del conflicto.
