Morelia, Michoacán
Si bien todavía no se conoce la versión final de la reforma electoral que pretende impulsar la Presidencia de la República, uno de los temas que se ha puesto sobre la mesa es eliminar el financiamiento para partidos políticos. Aunque no existe una respuesta oficial de los partidos no oficiales, sí se comienzan a analizar nuevas formas de repartir los recursos públicos.
La presidenta Claudia Sheinbaum ha planteado que los partidos se financien con recursos públicos sólo cuando haya elecciones, pero esto abre la puerta a que estén supeditados a los intereses de empresarios o peor aún, del crimen organizado, considera Antonio Carreño Sosa, diputado local de Movimiento Ciudadano (MC).
“Yo creo que es un gran riesgo en la situación de seguridad del país que los particulares financien a los que van a ser candidatos. Tenemos una problemática de incursión del crimen organizada en los procesos electorales. Si le quitamos el financiamiento a las elecciones a los partidos, es entregar, como sucede en Estados Unidos el tema electoral, a intereses particulares, algunos buenos, algunos malos y algunos quién sabe; entonces, yo creo que el tema no es que se financie, sino cómo se supervisa y cuánto se financia”, planteó.
En ese sentido, su propuesta es que se asignen recursos de manera proporcionalmente inversa a la cantidad de votos, como sucede en la NFL, que se financia en mayor medida a los equipos que no tienen oportunidad de elegir a sus jugadores.
Explicó que los partidos que ya están en el poder no tienen la misma necesidad de dar a conocer su proyecto, pero es a los que se les destina la mayor cantidad de recursos públicos, lo que sólo provoca que se afiancen en el poder.
“En una lógica ideal de que el 70% de este país sabe lo que es el oficialismo, sabe qué causas defienden, saben cómo operan y quiénes son sus liderazgos, pues el recurso que requieren para difundir su mensaje es menor. Tendría que ser los que menos conocimiento tienen, los que requirieran más herramientas. Y puede ir a la par de algunos candados como mayor porcentaje para el registro, se puede revisar, pero el objetivo de la reforma tiene que ser no consolidar el poder”, explicó.
Por otro lado, la propuesta que expone la coordinadora parlamentaria a nivel local del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Sandra Arreola, es que se divida el financiamiento en partes iguales para todos los partidos políticos.
La legisladora coincide en que no deben desaparecer las prerrogativas y que los espacios de radio y televisión también deberían de ser parejos para todos.
Las posturas oficiales de los legisladores de estos institutos políticos todavía no están definidas y depederán de cómo sea la propuesta final de la Presidencia y de lo que decidan sus dirigencias a nivel nacional; sin embargo, ambos legisladores coinciden en que es necesaria una reforma electoral, pero sobre todo para revisar temas de la elección del Poder Judicial, el voto electrónico y las acciones afirmativas.
Tanto MC en su carácter de oposición, como el PVEM, aliado del oficialismo, advierten que podrán estar de acuerdo en algunos aspectos de la reforma, pero no en su totalidad.