En respuesta a recientes señalamientos del gobierno estadounidense sobre presuntas operaciones de lavado de dinero a través de instituciones financieras mexicanas, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo desestimó las acusaciones al considerar que no existen pruebas concretas que las sustenten.
Durante su conferencia matutina del 26 de junio en Palacio Nacional, Sheinbaum abordó la polémica generada tras el anuncio del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el cual vinculó a los bancos CIBanco, Intercam y Vector con operaciones financieras supuestamente ligadas al narcotráfico. En ese contexto, la presidenta fue tajante: “No hay ninguna prueba, sólo señalamientos sin fundamento”.
Ante un grupo de gobernadores y funcionarios reunidos para la presentación del programa Polos de Bienestar, la mandataria enfatizó que el gobierno mexicano ha solicitado información adicional a las autoridades estadounidenses para esclarecer el origen de las acusaciones.
Indicó que las transferencias bajo escrutinio se relacionan con operaciones comerciales entre empresas chinas y mexicanas, pero que hasta ahora no se ha presentado ninguna evidencia que confirme actividades ilícitas.
“Colaboramos, pero no nos subordinamos”, subrayó Sheinbaum, dejando claro que México mantendrá una postura de respeto mutuo en su relación con Estados Unidos; añadió que tanto la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) ya han iniciado investigaciones, y aunque se identificaron algunas faltas administrativas, éstas no constituyen pruebas de lavado de dinero.
Sheinbaum también recordó casos previos en los que autoridades extranjeras actuaron sin bases sólidas, como la detención del general Salvador Cienfuegos en 2020. “Lo detuvieron sin pruebas y fue liberado porque no había nada que lo inculpara”, comentó.
Finalmente, la presidenta reiteró el compromiso de su administración con el combate al lavado de dinero, asegurando que el sistema financiero mexicano se encuentra fortalecido y cuenta con mecanismos sólidos de supervisión.
Fuente: El Universal Online