Morelia, Michoacán
Sin lugar a dudas, uno de los stands que más ha llamado la atención en la recién concluida Feria Internacional del Libro y la Lectura 2025 es el denominado “Lejos del teclado”, el cual se libera de la dependencia tecnológica para poner a nuestro alcance cuadernos o libretas hermosos con materiales reciclados.
Blanca Estela López, integrante de una sociedad que trata de rescatar la cultura mexicana mediante la utilización de materiales recuperados le comentó a Primera Plana Mx:
“Nosotros nos dedicamos a hacer todas las cosas lindas que se pueden hacer lejos de un teclado llámese tablet, computadora o celular, hacemos cuadernos que se ocupan para la escuela y para las oficinas a la hora de tomar notas. Las construimos de raya, puntos (ideales para dibujar) y lisos, en el formato que desee el cliente. Nuestra última novedad son las rayas para que escriben las personas zurdas, la cual apenas tienen un año en el mercado con muy buena acogida”.
Según nos explicó la creadora, lass portadas de estos cuadernos están hechas con Kraft (hojas ya usadas y molidas) y cartón, mientras que las hojas interiores son recicladas de calor cafecito y están unidas con espirales o cocidas.
La empresa trabaja tres modalidades: la profesional (más larga), la de bolsillo (cabe en la parte trasera del pantalón) o la de media carta que llamamos francesas, ideal para tomar notas en los salones o reuniones empresariales.
¿Y las imágenes que se ven en estos cuadernos?
Bueno, forman parte de nuestra política de rescate de los tesoros nacionales, trabajamos las imágenes del colibrí, la mariposa monarca, un guerrero jaguar, una dalia que es una flor nacional … hasta el calendario azteca. Tenemos dos creativos que les dan vida a las ideas de todos.
El equipo de “Lejos del teclado” radica en un municipio del Estados de México y es itinerante, porque participa en las ferias del libro de todo el país. Es una marca que nació hace 9 años para ayudar a los muchachos en las escuelas y al personal administrativo con productos de buena calidad.
Ellos demuestran también que, frente al desarrollo de la tecnología, necesario, pero, a veces, fatigante y adictivo, pueden emprenderse proyectos también atractivos y ecológicos que nos ayudan a ver la vida de manera menos robotizadas.