Dalilah Polanco comparte su experiencia de abuso por parte de un actor, destacando la importancia de la salud mental y el apoyo profesional.
Ciudad de México.-Dalilah Polanco ha confirmado su participación en la tercera temporada de La Casa de los Famosos. La actriz decidió entrar al reality tras la muerte de su abuela, quien fue una figura maternal clave en su vida. En una emotiva entrevista con el programa Sale el Sol, Dalilah reveló un doloroso episodio de abuso que vivió hace años a manos de un actor, cuyo nombre prefirió no revelar.
“Fue hace mucho tiempo… Decidí callarlo porque gracias a Dios no pasó a mayores conmigo. Pero sí fue un evento cierto”, compartió Dalilah, visiblemente afectada.
La actriz, conocida por su relación pasada con Eugenio Derbez, subrayó la importancia de sanar y no permitir que el abuso defina su vida. “La tarea es ve a terapia. ‘¿De verdad mi vida se va a regir por un pen…?’”. Reflexionó sobre el poder que se le otorga a quienes buscan hacer daño: “Si tu vida se va a regir por el pen… que trató de abusar de ti… y voy a ser quien soy por esa persona, le estás dando demasiada importancia”.
Con determinación, Dalilah enfatizó que el apoyo profesional es fundamental para superar tales experiencias. “Soy más importante yo. Mi salud mental es mucho más importante que el darle importancia a una persona que no sabe respetar ni a su esposa ni a sus hijos, porque si los respetara, me hubiera respetado a mí también”, afirmó.
Antes de esta revelación, Dalilah explicó que la muerte de su abuela fue el catalizador para unirse al reality. Aunque antes se había negado a participar en proyectos similares, ahora siente que es el momento adecuado. “El haber sido la séptima me gusta, el número siete me gusta… Que se murió mi abuela [me motivó]”, expresó.
Dalilah recordó cómo su abuela, doña Dalia López, fue fundamental en su crianza, especialmente cuando su madre debía trabajar lejos. “Todo, le aprendí todo, le aprendí absolutamente todo, Mi mamá me parió y se fue a trabajar lejos antes de la cuarentena… mi abuela y mi abuelo materno, ellos fueron los que me abrazaron en mis cinco primeros años de vida”.