Morelia, Michoacán.— Tras más de seis años al frente de la Fiscalía General del Estado (FGE), Adrián López Solís presentó su renuncia al cargo, la cual será efectiva a partir del próximo 20 de agosto. La decisión fue comunicada públicamente este domingo 6 de julio mediante un mensaje dirigido a la ciudadanía y al Congreso del Estado, al que notificará formalmente en las próximas horas.
López Solís, quien fue designado fiscal en febrero de 2019 por un periodo de nueve años, argumentó que su salida busca “generar las mejores condiciones que permitan reimpulsar los procesos de crecimiento y mejoramiento de las capacidades institucionales”, en respuesta a la creciente demanda social de justicia con resultados más eficaces.
Durante su gestión, el fiscal enfrentó un contexto complejo marcado por altos índices de violencia, impunidad y la presencia de grupos delictivos en diversas regiones del estado. En su mensaje, reconoció que, pese a los avances, persisten grandes pendientes en materia de procuración de justicia, los cuales requieren un esfuerzo coordinado entre los tres niveles de gobierno.
La renuncia de López Solís ocurre en un momento de presión social y política, en medio de cuestionamientos sobre la efectividad de la FGE y versiones extraoficiales sobre negociaciones políticas en torno a su salida. Mientras se concreta el relevo, el Congreso del Estado deberá iniciar el proceso para designar a la persona que asumirá la titularidad de la Fiscalía.