Persecución política contra Silvano Aureoles, acusa el ex senador Antonio García Conejo
Sin confirmar ni negar la detención, el exsenador Antonio García Conejo denunció que desde hace cuatro años se ha mantenido una campaña de persecución política contra su hermano, el exgobernador Silvano Aureoles Conejo, sin que hasta el momento se hayan presentado pruebas que sustenten las acusaciones en su contra.
Ante la incertidumbre por su paradero, y las versiones de su supuesta detención este sábado, García Conejo aseguró que su hermano siempre ha dado la cara y enfrentado las imputaciones en su contra, las cuales, dijo, han sido utilizadas con fines políticos.
En entrevista vía telefónica, consideró que la presunta detención forma parte de una estrategia para desviar la atención pública, especialmente luego de que en Estados Unidos se han intensificado las críticas contra el gobierno mexicano por supuestos vínculos con el crimen organizado.
Recordó que durante su gestión, Silvano intentó entregar pruebas sobre la presunta injerencia del crimen organizado en las elecciones en Michoacán, pero nunca fue recibido por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Subrayó que en varias ocasiones su hermano buscó ser escuchado y presentar documentación que acreditaba estos hechos, pero la negativa del gobierno federal, dijo, evidenció la falta de interés en investigar el tema.
Respecto a la posibilidad de que la persecución política alcance a otros exfuncionarios de la administración de Aureoles, consideró que los procesos abiertos contra el exsecretario de Finanzas y otros colaboradores responden a la misma lógica de presión política, ya que en todos los casos, aseguró, no se han presentado pruebas concluyentes.
Sobre si en el actual gobierno existen funcionarios que deberían ser investigados, García Conejo evitó hacer señalamientos específicos, pero insistió en que las leyes deberían aplicarse de manera equitativa y sin sesgos políticos.
Advirtió que las instituciones encargadas de la justicia deben actuar con responsabilidad y no utilizar su poder de manera selectiva.
Finalmente, aseguró que esta situación confirma la instauración de un modelo autoritario que busca silenciar a quienes cuestionan al gobierno.
Advirtió que la persecución política se mantendrá contra quienes se atrevan a expresar posturas críticas, pero sostuvo que, en su caso, no dejará de denunciar lo que considera un abuso de poder.
